¿Es el BMW Serie 2 el coupé compacto más equilibrado de todos?

Hay un problema en el sector del automóvil actual, y es que todos los modelos que no sean SUV y/o eléctricos lo tienen difícil para sobrevivir. Es una realidad triste que muchos ya estamos empezando a asimilar, disfrutando cada minuto que conducimos con algún coche diferente y que nos haga sentir especiales. Es el caso del nuevo BMW Serie 2, un coupé compacto que mantiene la fórmula tradicional para postularse como uno de los más completos del mercado.

La noticia más importante es que la nueva generación del Serie 2 mantenía la configuración de motor delantero longitudinal y propulsión, a diferencia de su hermano de gama los Serie 2 Gran Coupé o del BMW Serie 1 que cambió hace unos años. Eso le permite mantener personalidad y mirar de tú a tú a otros rivales. Aunque lo cierto es que entre los coupés compactos la mayoría son menos aprovechables por tamaño o por incomodidad.

Es cierto que las plazas traseras o el maletero del BMW Serie 2 se quedan algo justos en algunas ocasiones, pero siguen siendo mayores que en sus rivales y, en general, el balance es muy positivo. En el ámbito estético lo cierto es que ha conseguido un diseño continuista y a la vez más reconocible. La tecnología ha evolucionado hasta un punto muy elevado y la calidad de realización es notable, como en casi todos los productos de la firma alemana.

Aunque lo que de verdad enamora en el nuevo Serie 2 es su comportamiento. Tras haberlo probado y habiéndolo reflejado en el vídeo anterior, comprobamos que su chasis tiene una puesta a punto exquisita y que es capaz de transmitir como nadie. Incluso a bordo de la versión de acceso 220i, con motor de cuatro cilindros y 184 CV consigue sacar una sonrisa en cada curva. Queda claro por qué antaño se valoraba tanto a los coupés de corte deportivo y es más incomprensible que nunca ver cómo están desapareciendo.

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