Ford Shelby Cobra «Daisy»: cuanto el mito casi vuelve a renacer

El Shelby Cobra ha sido un icono del mundo del motor. Basta con ver la popularidad del deportivo americano a pesar de su poco tiempo en el mercado y también los precios que alcanzan actualmente en subastas. Por estos y otros motivos, Ford quiso devolverlo a la vida a principios de siglo con un prototipo que no dejó a nadie indiferente. El Ford Shelby Cobra «Daisy» fue presentado en el Salón de Detroit en el año 2004 y ahora vuelve a saltar a la palestra porque se encuentra a la venta.

Será subastada por Mecum Auctions la única unidad de este prototipo en el evento que se celebrará en agosto en Monterey (California). Con ese nombre en clave tan llamativo, fue hecho por Ford y tuvo como colaborador de honor al mismísimo Carroll Shelby. Este personaje que no necesita presentación en el mundo del motor trabajó con otros pesos pesados como Chris Theodore (Vicepresidente de Desarrollo de Producto de Ford) o J. Mays (Vicepresidente de Diseño de Producto) para devolver a la vida al mítico Cobra.

La idea es que se tomasen componentes del Ford GT para crear un pequeño descapotable que estaba llamado a ser el más radical de su época. Estrenaba un chasis de aluminio de gran rigidez, sobre el que iba montada una ligera carrocería a base de fibra de vidrio. El diseño ya llamó la atención de muchos en ese momento. El interior biplaza era minimalista a más no poder, destacaba por su sencillez y por no tener apenas mandos, todo tenía que centrarse en la conducción.

Es por eso que emplearon un motor V10 de 6.4 litros DOHC con lubricación por cárter seco que había sido hecho por el departamento Advanced Powertrain de Ford. Desarrollaba una potencia de 605 CV que pasaban directamente al eje trasero, pues como un buen Cobra, tenía que ser de propulsión. Utilizaba una transmisión manual de seis velocidades firmada por Ricardo, la misma que estaba presente en el Ford GT. No se llegaron a homologar sus prestaciones, pero prometía mucho.

El Ford Shelby Cobra «Daisy» tenía un reparto de pesos perfecto (50:50) y contaba con las suspensiones independientes delantera y trasera del Ford GT, además de una dirección asistida por piñón y cremallera. Los frenos estaban firmados por Brembo y contaba con pinzas de cuatro pistones, mientras que las llantas eran unas BBS de siete radios. Ciertamente, lo tenía todo para triunfar, pero el destino no quiso que este proyecto se hiciera realidad.

El Ford Shelby Cobra Concept era presentado a principios de 2004 con vistas a que llegase a producción para el año 2007. En ese tiempo se estuvo finalizando su fase de desarrollo en circuitos como el de Irwindale Speedway, con un Carroll Shelby entusiasmado por su comportamiento y la prensa especializada teniendo la oportunidad de montarse junto a él. Sin embargo, la crisis hizo que finalmente no pudiera llegar al mercado, pues tuvieron que priorizar los presupuestos en otros proyectos más lógicos.

La historia nos deja con un único prototipo del Ford Shelby Cobra «Daisy» fabricado, que iría a parar a las manos de Chris Theodore. Se dice que el directivo llegó a pagar 825.000 dólares por este ejemplar y posteriormente lo sometió a una restauración completa y a una homologación para que pudiera rodar por carretera abierta. En los últimos años se ha estado paseando por los eventos de motor más carismáticos y ahora está dispuesto a cambiar de manos, seguro que por una suculenta suma.