Chevrolet Camaro 2016: las seis claves de la sexta generación

Ya se conoce la sexta generación del Chevrolet Camaro. Fabricado en Michigan, llegará al mercado a finales de año, justo cuando Chevrolet se despide de Europa, si bien sus productos más especiales, el Corvette y este Camaro, seguirán teniendo un hueco en los concesionarios españoles (habrá que esperar para saber cuáles), para rivalizar con el Ford Mustang.

Si bien en un primer vistazo podría  parecer que cambia muy poco respecto a la quinta generación que probamos, nada más lejos de la realidad. La marca dice que tan solo se han mantenido los emblemas de la marca.

Puede parecer casi idéntico, pero ahora el Camaro es nada menos que 6 cm más corto que su predecesor. En un mundo en el que los coches son cada vez más grandes, es toda una sorpresa. De este modo, su longitud total se queda en 4.784 mm. También se reducen ottars cotas, como la anchura (1.897 mm, 2 cm menos y la altura, 1.348 mm, 3 cm menos).

Sí, es más compacto, pero mantiene los rasgos definitorios de un muscle car como el capó largo y una línea de cintura alta y muy ancha, con unos prominentes pasos de rueda traseros o la enorme parrilla, dividida en dos alturas con faros muy estrechos. Y sus formas varían, pues se ha esculpido tras 350 horas en el túnel del viento, de ahí esa apariencia, más atlética que nunca.

Por último, como cabría esperar de un coche así, será muy personalizable. Desde la marca informan que se podrá elegir entre diez colores de carrocería, cinco tonos de tapicería, y diversas (llantas, adhesivos...).

No es que fuese malo... pero del aprobado raspado el Camaro pasa a tener un habitáculo notable. No ha habido una revolución en el diseño, que sigue las pautas del anterior, pero sí hay cambios. Destaca el nuevo cuadro de instrumentos, que mantiene dos grandes relojes analógicos, que flanquean la pantalla de ocho pulgadas.

En la consola central domina otra pantalla y tras el cambio de marchas, sobresale el freno de esatcionamiento eléctrico, que libera mucho espacio entre los asientos. El diseño del volante también cambia, así como el de los difusores del aire.

También aquí aumenta las posibilidades de personalización, con cinco tonos de carrocería y hasta 24 colores entre los que elegir la iluminación ambiental, mediante LEDs, que podrán cambiarse automáticamente.

Chevrolet Camaro 2016. Motores

La mayor novedad es que, por vez primera, el Camaro tendrá una mecánica de cuatro cilindros, sin duda para evitar que los consumidores que buscan consumos comedidos en estas carrocerías tan especiales solamente tengan como opción el Ecoboost del Ford Mustang. Hay también versiones de seis y ocho cilindros,  que podrán elegirse con cambio automático de ocho velocidades o bien con uno manual de seis marchas.

El de cuatro cilindros destaca por consumo (7,8 l/100/km) y posiblemente por confort de marcha, ya qe contará con sistema de cancelación activa de sonido, que utiliza ondas para cancelar ruidos molestos en el habitáculo. El de seis cilindros es capaz de desconectar dos de ellos en condiciones de baja carga para reducir los consumos. También contará con ello el más potente, el V8 con cambio automático, que solamente estará disponible con el acabado SS. Los dos motores más potentes.

Como nuevo Chevrolet Camaro se basa en una nueva arquitectura, sobre una plataforma de nueva factira que permite ahorrar hasta 90 kg de peso respecto a la anterior generación. Solamente en ella ha sido posible reducir 60,5 kg el peso. El empleo de aluminio en diversas zonas, como las suspensiones, o la estructura del salpicadero (4,2 kg menos), permiten que pueda enfrentarse a la báscula en condiciones.

A pesar de ser más ligero, como también es más pequeño aumenta su rigidez estructural nada menos que un 28%. También estrena suspensión delantera multibrazo de tipo MacPherson (con nueva puesta a punto) y un eje trasero independiente de cinco brazos (nuevo, que ahorra 12 kg). Junto a la dirección, que promete ser más precisa, debería ser más dinámico en curva, más del gusto europeo.

El Camaro SS, el tope de gama, contará además con el Magnetic Ride Control, la suspensión activa capaz adaptar la amortiguación en función de la vía. Esta versión cuenat también con frenos Brembo (discos de 345 delante y 338 milímetros detrás), y pinzas de cuatro pistones.De este modo, según la marca, consigue ser más rápido en circuito que el Camaro SS 1LE de la anterior generación.

Chevrolet Camaro 2016. Equipamiento

La anterior generación arrasó en ventas pero, tras el salto evolutivo del Mustang, era necesario contar con el Camaro más avanzado de la historia.

Se ofrecerá en variantes LT y SS, como hasta ahora. El Camaro SS tiene un spoiler trasero propio, tomas de aire delanteras para ventilación de frenos, capó ventilado, LED en los pilotos traseros y llantas de 20 pulgadas (opcionales en el LT, que monta de serie de 18 pulgadas).

Cuenta con diversa tecnología para variar la respuesta del respuesta del motor (distintos mapas de gestión del motor), el cambio (si es automático), el tacto y la dureza de la dirección. El conductor podrá elegir entre tres modos de conducción (Snow/Ice, Tour y Sport) a los que se añade el Track, en la versión SS.

Y por supuesto, el sistema multimedia, controlable desde la pantalla en el centro de la consola, que contará con la tecnologúa MyLink para mejorar la conectividad.

Fuente: Chevrolet

Ver galeria (20 fotos)